La Ciudad de México dio un paso decisivo hacia la consolidación de un ecosistema económico basado en ciencia y tecnología con la inauguración de la Unidad de Innovación Genómica y Clínica (ITRASIG) en el campus del Tecnológico de Monterrey. El proyecto, impulsado por la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDECO), busca posicionar a la capital como referente nacional e internacional en investigación biomédica y desarrollo tecnológico.
Durante la ceremonia, Manola Zabalza Aldama, titular de SEDECO, destacó que la iniciativa responde al compromiso de la Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, de construir un modelo económico que articule talento, academia, industria y gobierno.
“La Ciudad de México tiene todo para ser el epicentro de la innovación biomédica: talento, infraestructura, política industrial y voluntad institucional. Apostamos por una economía que, además de generar empleos, mejore la vida de las personas mediante ciencia con propósito”, afirmó Zabalza.
La nueva unidad se presenta como una plataforma que acelerará la transferencia tecnológica, facilitará la llegada de inversión nacional y extranjera, y fomentará la creación de empleos especializados en salud, al mismo tiempo que ampliará el acceso de la población a terapias innovadoras.
El proyecto no solo fortalecerá las cadenas de valor locales, sino que también consolidará la colaboración con los principales institutos públicos de salud del país, asegurando que los beneficios de la investigación se traduzcan en bienestar social compartido.
Con este paso, la Ciudad de México reafirma su apuesta por la innovación científica y el desarrollo sostenible, colocando al conocimiento como motor de la economía y al bienestar como centro de su política pública